Fabián Gómez, más conocido como Piñón Fijo, reapareció tras varios meses en silencio y contó cómo está la relación con sus hijos tras el escandaloso conflicto familiar que había tomado estado público después de su divorcio de Karina Suárez.
En diálogo con el programa "A la Tarde" (América), el animador infantil afirmó: “Estamos solucionando las cosas a puertas cerradas. Las puertas materiales, pero las del corazón están totalmente abiertas. Y eso lo manejamos en familia, eso queda ahí y lo que se está tratando de reconstruir queda en la intimidad familiar”
“Hay mucha gente atravesada por esta problemática”, agregó al hacer referencia al derecho de los abuelos a ver a sus nietos.
Al ser consultado sobre si extrañaba el vínculo con sus hijos, respondió: “No, porque todavía lo tengo y lo estoy tratando de reconstituir, pero puertas adentro”. “Cualquier cosa que diga, en general... Hay un mecanismo, hoy por hoy, que aprendí. Que si yo te digo media frase a vos, eso es título de otro medio que lo va a desvirtuar”, dijo.
Tampoco le contestó a quienes lo señalan de maltratador y ni quiso mandar mensajes públicos a su familia. “No voy a decir nada. Y, ¿cómo no voy a amar a mi hija? No voy a hablar del tema, porque esto hay que hablarlo puertas adentro de la familia. No es un medio válido la tele o las redes... Eso sí uno aprendió a manejarlo y a tratar de ser respetuoso, porque muchas cosas que uno diga son fragmentadas y eso hiere a otro que uno ama”, subrayó.
“Se fue de las manos”
En otro tramo del reportaje, Piñón Fijo hizo un mea culpa sobre la exposición mediática de sus conflictos privados. “Se fue de las manos... Ahí la inteligencia artificial y la inteligencia artificial hicieron lo suyo”.
“A mi me pasa lo mejor que le puede pasar a un padre, que un hijo venga y te diga: ‘Papá, quiero hacer mi propio camino y quiero hacerlo con las herramientas que aprendí al lado tuyo’. Con eso uno ya está hecho. Después, los matices que hay como en toda familia, lo vas manejando”, dijo y contó que el día en que habló eso con su hijo Jeremías: “Nos emocionamos, nos abrazamos y lloramos en su momento. Y tampoco lo hicimos público, fue una cuestión íntima”.
Por último, al ser consultado sobre si quería ver a su nieta sostuvo que “estamos en un proceso hermoso e íntimo de reconstrucción de una cantidad de cosas que nunca tendrían que haberse filtrado a los medios. Se nos fue de las manos en los medios”, finalizó.